" REIVINDICAMOS TODOS LOS TIPOS DE DESCANSO, YA SEA EN HORIZONTAL Y SIN HACER NADA, O REALIZANDO CUALQUIER ACTIVIDAD POR EL MERO PLACER DE HACERLA, SIN NINGUNA FINALIDAD. NOS GUSTA LA IDEA DE HACER LAS COSAS CON EL ÚNICO OBJETIVO DE SENTIR. Y DE ESTA FILOSOFÍA NACE MANDRA. "
S entirse libre es una opción que nace en el interior de cada una de las personas. Cada circunstancia, situación o incluso la forma de afrontar la vida nos acerca o aleja de forma inconsciente a la libertad. La actitud por encima de todo. Sentir y disfrutar sin ningún objetivo fijado. Es la filosofía que Esther y Gemma quisieron plasmar en Mandra, una marca de pijamas, homewear y bañadores que transmiten esa esencia relajada a través de cada una de sus prendas.
A partir de esa idea, desarrollaron lo que para ellas fue una forma de expresión e incluso de reflexión sobre el ritmo de vida y consumo impulsivo presente en nuestra sociedad y en su día a día en particular. Un punto de inflexión en sus vidas en el que surgieron preguntas en relación a sus hábitos de consumo e iniciaron un camino hacia una vida más sostenible.
“Decidimos empezar a consumir de forma más sostenible, a leer las etiquetas de aquello que comprábamos y cuanto más leíamos al respecto nos sentíamos menos libres y menos justas. En nuestra búsqueda de marcas sostenibles nos dimos cuenta de la poca variedad que existía por entonces”.
Así que decidieron dar un paso adelante y crear una marca con la que contribuir a menor o mayor escala a un consumo más consciente. Su pequeño granito de arena que aportara un impulso hacia la sostenibilidad de un mundo de la moda que lucha por cambiar su forma de producir. Mandra nació para ser una marca que transmitiera la necesidad de parar y reflexionar. Tener tiempo para pensar que estas haciendo y por qué lo estás haciendo. Una clara reivindicación a priorizar y llevar a cabo aquello que realmente queramos hacer, sin más finalidad que sentir y vivir el momento.
Para ello crearon pequeñas y exclusivas colecciones de pijamas, homewear y bañadores con un alto standard de calidad, atemporales y con tejidos totalmente sostenibles, duraderos y siempre elaborados en talleres locales de proximidad. Al producir pocas unidades en cada una de sus colecciones, Mandra consigue reducir al máximo el consumo de materiales al mismo tiempo que les permite gestionar al detalle cada uno de los pedidos.
Mandra es una marca valiente, cómoda y con un estilo único que nace para representar a las denominadas Restless women. Aquellas mujeres inquietas, determinadas, capaces de conseguir lo que se propongan y que disfrutan haciendo cualquier cosa. Y es que Mandra ha conseguido convertir la sencillez de sus colecciones elaboradas con colores básicos en las perfectas prendas para disfrutar de cualquier actividad sin importar el momento, el lugar o la finalidad de la misma.
Una forma de celebrar el placer de disfrutar de la vida de forma relajada y al mismo tiempo cambiar a una forma de consumo que nos haga ser más conscientes de los pequeños momentos cotidianos que en muchas ocasiones pasan desapercibidos. Aquí o allí. Ahora o más tarde. No importa el tiempo, ni tampoco el lugar. Mandra llega para hacerte sentir bien. Y sin duda, lo ha conseguido.
Fotografías: Silvia Gil Roldán
" REIVINDICAMOS TODOS LOS TIPOS DE DESCANSO, YA SEA EN HORIZONTAL Y SIN HACER NADA, O REALIZANDO CUALQUIER ACTIVIDAD POR EL MERO PLACER DE HACERLA, SIN NINGUNA FINALIDAD. NOS GUSTA LA IDEA DE HACER LAS COSAS CON EL ÚNICO OBJETIVO DE SENTIR. Y DE ESTA FILOSOFÍA NACE MANDRA. "
S entirse libre es una opción que nace en el interior de cada una de las personas. Cada circunstancia, situación o incluso la forma de afrontar la vida nos acerca o aleja de forma inconsciente a la libertad. La actitud por encima de todo. Sentir y disfrutar sin ningún objetivo fijado. Es la filosofía que Esther y Gemma quisieron plasmar en Mandra, una marca de pijamas, homewear y bañadores que transmiten esa esencia relajada a través de cada una de sus prendas.
A partir de esa idea, desarrollaron lo que para ellas fue una forma de expresión e incluso de reflexión sobre el ritmo de vida y consumo impulsivo presente en nuestra sociedad y en su día a día en particular. Un punto de inflexión en sus vidas en el que surgieron preguntas en relación a sus hábitos de consumo e iniciaron un camino hacia una vida más sostenible.
“Decidimos empezar a consumir de forma más sostenible, a leer las etiquetas de aquello que comprábamos y cuanto más leíamos al respecto nos sentíamos menos libres y menos justas. En nuestra búsqueda de marcas sostenibles nos dimos cuenta de la poca variedad que existía por entonces”.
Así que decidieron dar un paso adelante y crear una marca con la que contribuir a menor o mayor escala a un consumo más consciente. Su pequeño granito de arena que aportara un impulso hacia la sostenibilidad de un mundo de la moda que lucha por cambiar su forma de producir. Mandra nació para ser una marca que transmitiera la necesidad de parar y reflexionar. Tener tiempo para pensar que estas haciendo y por qué lo estás haciendo. Una clara reivindicación a priorizar y llevar a cabo aquello que realmente queramos hacer, sin más finalidad que sentir y vivir el momento.
Para ello crearon pequeñas y exclusivas colecciones de pijamas, homewear y bañadores con un alto standard de calidad, atemporales y con tejidos totalmente sostenibles, duraderos y siempre elaborados en talleres locales de proximidad. Al producir pocas unidades en cada una de sus colecciones, Mandra consigue reducir al máximo el consumo de materiales al mismo tiempo que les permite gestionar al detalle cada uno de los pedidos.
Mandra es una marca valiente, cómoda y con un estilo único que nace para representar a las denominadas Restless women. Aquellas mujeres inquietas, determinadas, capaces de conseguir lo que se propongan y que disfrutan haciendo cualquier cosa. Y es que Mandra ha conseguido convertir la sencillez de sus colecciones elaboradas con colores básicos en las perfectas prendas para disfrutar de cualquier actividad sin importar el momento, el lugar o la finalidad de la misma.
Una forma de celebrar el placer de disfrutar de la vida de forma relajada y al mismo tiempo cambiar a una forma de consumo que nos haga ser más conscientes de los pequeños momentos cotidianos que en muchas ocasiones pasan desapercibidos. Aquí o allí. Ahora o más tarde. No importa el tiempo, ni tampoco el lugar. Mandra llega para hacerte sentir bien. Y sin duda, lo ha conseguido.
Fotografías: Silvia Gil Roldán